Reed Jobs honra el legado de su padre y lidera la lucha contra el cáncer

El hijo de Steve Jobs se une a la batalla contra el cáncer con un fondo multimillonario

El cáncer de páncreas, un raro y despiadado enemigo, marcó la vida de Steve Jobs, reconocido como un pionero de la industria tecnológica y símbolo perdurable en la memoria colectiva. En 2003, recibió el devastador diagnóstico que finalmente se cobraría su vida años más tarde.

Después de resistirse y explorar diversas alternativas, en 2004 Steve finalmente se sometió a una cirugía para extirpar la mayor parte del tumor. Cinco años más tarde, en 2009, enfrentó un trasplante de hígado en un intento por contrarrestar los estragos causados por el tumor original. Aunque se esperaba que esta intervención quirúrgica le brindara una oportunidad de recuperación respaldada por sus inmensos recursos, nada volvió a ser como antes. Todos fuimos testigos del vertiginoso deterioro de su salud, de cómo se consumía lentamente hasta que finalmente sucumbió en 2011, a la temprana edad de 56 años.

Esta dolorosa experiencia dejó una profunda marca en el corazón de Reed Jobs, hijo del eminente empresario. Ahora, con determinación y esperanza, Reed ha anunciado el lanzamiento de un fondo multimillonario destinado a combatir esta perniciosa enfermedad.

Según un artículo publicado en The New York Times, Reed Jobs tiene como propósito fundamental ayudar a aquellos pacientes diagnosticados con cáncer. Para lograrlo, ha dado a conocer la creación de Yosemite, un fondo de capital de riesgo diseñado para invertir en innovadores tratamientos médicos. Yosemite, nombre escogido para el fondo, no solo es el nombre de una versión del prestigioso sistema operativo macOS, sino también el nombre del parque nacional donde los padres de Steve Jobs contrajeron matrimonio. Este detalle otorga un valor adicional al proyecto, que surge como una manifestación tangible de amor y gratitud hacia el legado de su padre.

Reed, quien estudió premedicina con el deseo de convertirse en médico y sanar a las personas personalmente, enfrentó grandes desafíos emocionales tras la muerte de su padre. Sin embargo, se dio cuenta de que como inversor de capital de riesgo, podía marcar una gran diferencia en este emprendimiento.

Hasta la fecha, el fondo Yosemite ha logrado recaudar 200 millones de dólares, una suma considerable y adecuada para iniciar sus operaciones. Reed ha establecido una ambiciosa meta de alcanzar los 400 millones de dólares, demostrando su determinación incansable por honrar la memoria de su padre y marcar una diferencia significativa en la lucha contra el cáncer. El compromiso financiero del fondo Yosemite refleja este objetivo y establece un notable récord en los fondos recaudados hasta el momento y la meta propuesta.