El contraste sorprendente entre los costos de fabricación y el precio de venta de los iPhones de Apple
Los dispositivos iPhone de Apple se han destacado por su reputación de ser productos de alta gama y, en consecuencia, no precisamente económicos. Cualquier persona que haya considerado adquirir uno de estos teléfonos inteligentes puede dar fe de su elevado precio. La explicación aparentemente simple para justificar los costos altos de los productos de la compañía con sede en Cupertino es que el consumidor está adquiriendo un producto duradero y de calidad inigualable.
No obstante, si ahondamos en los detalles, descubrimos que la situación es más compleja de lo que parece. Por esta razón, la firma de análisis Statista se ha embarcado en una investigación para determinar cuánto dinero le cuesta a Apple fabricar un iPhone, con el fin de estimar las ganancias que obtiene la empresa por cada unidad vendida. El resultado es sorprendente: no todo es ganancia pura.
De acuerdo con las cifras proporcionadas por Statista y recogidas por el prestigioso sitio especializado Slash Gear, Apple se ha posicionado como responsable de casi la mitad, un asombroso 48,7%, de la cuota de mercado mundial de smartphones en el año 2022. En Estados Unidos, el país de origen de la compañía, se estima que existen alrededor de 120 millones de iPhones en manos de los consumidores.
Estas cifras son impactantes y demuestran la influencia y popularidad que ha alcanzado Apple en el competitivo mundo de los teléfonos inteligentes. Sin embargo, Statista deja claro en su informe que Apple no revela abiertamente los costos asociados con la producción y fabricación de sus codiciados dispositivos móviles.
Ante esta falta de información, la firma de análisis ha desglosado minuciosamente los componentes que conforman un iPhone, con el objetivo de estimar el costo de fabricación de cada unidad. De esta manera, se revela la complejidad del proceso de producción de Apple, que involucra la adquisición de diversos componentes en el mercado para ensamblar sus dispositivos. Entre los elementos clave se encuentran el procesador, la pantalla, la memoria, el controlador SIM, los módems, las cámaras, los escáneres, la batería e incluso el vidrio de las pantallas. Apple recurre a proveedores reconocidos como Sony (cámaras), Qualcomm (procesador y módem 5G), Samsung (pantalla) y otras empresas chinas, holandesas, suizas y estadounidenses para obtener estos componentes esenciales.
A lo largo de los años, los costos de fabricación han experimentado un constante aumento. En 2007, Apple destinaba la suma de 217,73 dólares para producir un iPhone que luego sería vendido por 500 dólares. Sin embargo, para el año 2019, el costo de fabricación de un iPhone 11 Pro Max ascendió a 450 dólares, mientras que su precio de venta se situó en los imponentes 1.100 dólares.
Aunque aún es temprano para conocer con precisión los costos de producción del último modelo, el iPhone 15, hasta la versión anterior los precios se han mantenido en rangos similares. Esto implica diferencias porcentuales que alcanzan un asombroso 124%.
No obstante, vale la pena destacar que estos números no reflejan directamente las ganancias netas que obtiene Apple. Entre los gastos asociados a la compañía se incluyen los costos laborales, las campañas publicitarias, los gastos de envío y todos los demás aspectos necesarios para mantener una corporación de tal envergadura en funcionamiento.
Los precios de los iPhone de Apple son el resultado de una combinación de factores que incluyen costos de producción, calidad y durabilidad, así como los gastos inherentes a la gestión de una empresa de renombre internacional. La inversión en un iPhone no solo representa un lujo tecnológico, sino también un respaldo a la innovación y la búsqueda constante de ofrecer a los usuarios una experiencia excepcional en el mundo de la telefonía móvil.