A prisión el joven que perpetró el «gran hackeo» de Twitter
El ‘hacker’ no podrá tener acceso a un ordenador sin supervisión mientras dure la condena
En el verano de 2020, Twitter fue víctima de un hackeo masivo, el cual fue llevado a cabo por un hacker adolescente.
Graham Ivan Clark, el joven de 17 años que fue acusado de provocar el «gran hackeo» que sufrió la red social el pasado verano, ha sido condenado a tres años de cárcel tras sentencia dictada por un Tribunal de Florida (Estados Unidos).
El ciberataque dirigido por Clark provocó que las cuentas de Twitter de muchas personalidades populares (entre ellas las de Barack Obama, Elon Musk, Bill Gates o el actual presidente de Estados Unidos, Joe Biden) y muchos usuarios verificados más empezaran a tuitear mensajes animando a invertir en Bitcoin, aunque en realidad la inversión como tal no se producía, sino que el dinero iba a caer a su cuenta bancaria.
Para desarrollar esta estafa, se valió de la ayuda de dos colaboradores que había conocido mediante un foro de Internet y tuvo acceso a herramientas internas de Twitter, las que empleados de la compañía utilizan para hacer reset en las cuentas de correo de los usuarios.
Tanto el joven como sus colaboradores obtuvieron el control de esas herramientas el 15 de julio del año pasado. Su hackeo representó en su momento la mayor brecha de seguridad que Twitter ha experimentado hasta la fecha.
La red social se vio forzada a suspender la actividad en la mayor parte de las cuentas verificadas en la plataforma durante varias horas, hasta que lograra restablecer el servicio sin que se publicaran mensajes invitando a invertir en Bitcoin.
Gracias a los mensajes que fueron publicadas por las personalidades citadas, el joven de 17 años obtuvo (junto a sus socios) más de 100.000 dólares en criptomonedas enviadas por usuarios que cayeron en su estafa.
El joven ciberdelincuente ya ha prestado 229 días de trabajos forzosos como parte del servicio comunitario desde que fuese arrestado el pasado verano (también fueron presentados cargos delictivos contra sus padres) mientras se esperaba la sentencia. Ahora, la misma ya es efectiva y además en ella se recoge también que se le prohíbe el tener acceso a computadores sin supervisión mientras dure su condena.
Con información de Trece Bits
