El nuevo telescopio más grande del mundo, ELT, avanza en su construcción: todo lo que necesitas saber

El proyecto del ELT, el telescopio más grande del mundo, sigue en marcha: descubre los detalles

El proyecto del Telescopio Extremadamente Grande (ETL), también conocido como Extremely Large Telescope en inglés, continúa avanzando a paso firme en la cima del Cerro Armazones, ubicado en el desierto de Atacama, Chile. Este logro es uno de los más destacados para la astronomía en los últimos años y es liderado por el Observatorio Europeo Austral (ESO). Actualmente, el ETL ya ha completado la primera mitad de su construcción, la cual comenzó en el año 2014. Se espera que el telescopio comience sus observaciones científicas en el año 2028, y se espera que tenga un impacto significativo en el futuro de la astronomía.

Luis Chavarría, astrónomo y representante del ESO en Chile, enfatiza que el ETL será el telescopio óptico infrarrojo más grande del mundo y que será casi diez veces más potente que el James Webb, el telescopio que actualmente se encuentra en el espacio. Debido a su capacidad de resolución, el ETL podrá observar las atmósferas de exoplanetas con gran detalle, lo que permitirá estudiar sus componentes y explorar nuevos descubrimientos en este campo.

Pero, ¿cuáles son las partes esenciales del Telescopio Extremadamente Grande de ESO en Chile? Este telescopio contará con un diseño óptico pionero de cinco espejos, los cuales trabajarán juntos de manera coordinada para ofrecer una visión detallada del universo.

El primer espejo, M1, es un cóncavo gigante de 39 metros que recogerá la luz del cielo nocturno y la reflejará en el secundario, M2. Este espejo convexo colgará sobre M1 y reflejará la luz hacia M3, el cual recibirá la luz por reflejo desde M2 y la transmitirá a un espejo plano adaptativo (M4). Este último espejo, M4, ajustará su forma mil veces por segundo para corregir las distorsiones causadas por la turbulencia atmosférica, garantizando una imagen clara y precisa. Finalmente, la luz será recibida por el espejo plano inclinable M5, el cual estabilizará la imagen y la enviará a los instrumentos del ELT.

El Telescopio Extremadamente Grande depende en gran medida del control de frente de onda integrado, cuyo propósito es mantener el frente de onda y el seguimiento dentro de las tolerancias. Según Chavarría, este telescopio y otros en Chile permitirán que más del 60% de la capacidad observacional de telescopios ópticos e infrarrojos se concentren en el país, lo que es una ventaja única. Ningún otro país en el mundo tiene la capacidad de utilizar estos telescopios en su máxima expresión, lo que hace que el proyecto ETL sea aún más emocionante.

En conclusión, el Telescopio Extremadamente Grande es un proyecto fascinante que promete grandes descubrimientos en el futuro de la astronomía y representa un importante paso adelante en la exploración del universo. Con la construcción en marcha y las observaciones científicas previstas para 2028, el ETL se encuentra en camino de convertirse en una herramienta vital para la comunidad científica que permitirá nuevas investigaciones y descubrimientos en la astronomía.

ELT, el proyecto del telescopio más grande y avanzado del mundo, avanza a buen ritmo

ELT: la construcción del telescopio que nos permitirá ver más allá de lo que nunca imaginamos

 

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