TikTok: la novedosa aplicación china que persuade a los adolescentes a dejar Facebook
Las redes sociales viven un cambio generacional. Los más jóvenes no encuentran motivos para publicar mensajes en la mayor red social del mundo, Facebook. Aunque la empresa fundada por Mark Zuckerberg supo adelantarse al futuro con la adquisición de Instagram o WhatsApp, este año presenció cómo una aplicación china llamada TikTok revoluciono el ecosistema de medios sociales.
Lo hizo a partir de una propuesta fresca, aunque poco novedosa, como es la creación de microvídeos. Un fenómeno que cautivó a los usuarios más jóvenes de países como Estados Unidos o España a pesar de causar miedo sobre su política de uso.
Su influencia es notable. Está entre los cinco servicios más descargados en las tiendas de aplicaciones en España y durante largos periodos del año fue la más descargada en el mercado estadounidense. Acumula, según informes, unos 600 millones de usuarios.
Todo a partir de una dinámica basada en la creación de vídeos cortos que varían entre los tres y los treinta segundos. Para ingresar se necesita, según sus términos de uso, tener al menos 13 años, aunque la inexistencia de un sistema de verificación de edad impide conocer si realmente se cumple.
Según datos del medio «Digiday», el 60% de sus usuarios en Android tiene entre 13 y 24 años, con profusión femenina. Cada niño, según estimaciones de «The Wall Street Journal», dedica una media de 45 minutos diarios a navegar por esta red social.
Hervé Lambert, responsable de operaciones de consumo de la empresa de seguridad Panda, lamenta la falta de atención de los adultos hacia esta plataforma: «todos los niños hablaron de TikTok, pero los padres no, y eso supone un problema porque el efecto moda les encaja mucho a los jóvenes porque su afán es conseguir seguidores«.
A su juicio, el servicio dio con la fórmula para «generar adicción» porque genera en el usuario el deseo de ser «parte del ecosistema». De ahí a que aparecieron numerosos retos virales, algunos peligrosos para la salud por las posibles autogestiones, pero también se han detectado perfiles falsos de usuarios que intentan captar a jóvenes.
La aplicación, según Samuel Parra, experto en derecho digital, «en general son correctos y bastante completos», pero critica a ABC la venta de los datos de sus usuarios a empresas de terceros. «El problema es que no dicen qué datos, si se van a compartir con sus socios para enviar publicidad», algo que asegura que es obligatorio indicarlo. Pero, a su vez, la empresa se salta la privacidad de los menores en la Red, que exige que los los servicios digitales dirigidos a niños obtengan el consentimiento de los padres.
Con información de Globovisión