Europa inicia una investigación sobre Facebook por posible abuso de poder
Vuelta a la carga contra el abuso de poder. La Unión Europea enfila una nueva batalla contra los gigantes de la tecnología estadounidenses que operan en territorio comunitario. Tras las tres sanciones impuestas a Alphabet, multinacional propietaria de Google y Android, el siguiente en la lista puede ser Facebook, que se encuentra en el punto de mira desde que saltó el escándalo de Cambridge Analytica. Reguladores antimonopolio han iniciado el escrutinio sobre la red social para saber si perjudica a la competencia.
Según informa «Bloomberg», que cita dos personas cercanas a la investigación, la Comisión Europea (CE) ha enviado informes y cuestionarios a un grupo de clientes y empresas rivales de Facebook para conocer de primera mano el posible impacto de algunas de las prácticas de la compañía estadounidense. Se trata de las primeras fases, que puede materializarse la próxima semana cuando las compañías entreguen sus respuestas.
Las autoridades europeas, de esta manera, pretenden analizar la plataforma de comercio electrónico y venta de la red social, así como utiliza y comparte los datos de los usuarios. Esta cuestión lleva tiempo sobre la mesa de la CE, que desde el pasado año se interesó sobre las posibles prácticas de la compañía fundada por Mark Zuckerberg en este área.
De hecho, la propia comisaria de la Competencia en Europa, Margrethe Vestager, señalada como vicepresidenta segunda tras el reparto de poder en la CE, avanzó que le preocupaban una batería de correos electrónicos de Facebook que fueron filtrados y que contenían peticiones para cortar el acceso a los datos de sus usuarios de empresas rivales.
Esta medida coincide con la sanción impuesta por las autoridades alemanas a la multinacional de 2,3 millones de euros por «no informar sobre las denuncias de contenido ilegal en su plataforma de redes sociales violando la ley del país sobre la transparencia de internet».
En Alemania, las plataformas de medios sociales están obligadas a informar el número de quejas de contenido ilegal que han recibido. La firma estadounidense ha subrayado, sin embargo, que había cumplido con sus obligaciones de transparencia -conocidas como «NetzDG»- pero ha añadido que algunos apartados de la ley no estaban lo suficientemente claros. La red social ya fue sancionada por no proporcionar suficiente información durante la adquisición, por 19.000 millones de euros, de la aplicación WhatsApp.
Con información de ABC