Zoom afirma no utilizar videollamadas en el adiestramiento de su inteligencia artificial
En respuesta a una reciente actualización en los términos de servicio de Zoom, la prestigiosa plataforma de videollamadas ha dejado en claro que no utilizará las llamadas de sus valiosos clientes para alimentar el desarrollo de su sofisticada inteligencia artificial (IA). Esta decisión se tomó con el fin de abordar las crecientes preocupaciones sobre la privacidad de los usuarios, que surgieron a raíz de la mencionada actualización.
Los nuevos términos de servicio insinuaban la posibilidad de utilizar el aprendizaje automático y los datos generados por el servicio para el desarrollo de productos y servicios. Tal revelación causó una conmoción en el ámbito de la confianza, ya que se interpretó que los modelos de IA podrían nutrirse de las videollamadas de los usuarios.
Ante la inquietud generalizada, Smita Hashim, distinguida como Directora de Producto Principal de Zoom, no tardó en abordar las preocupaciones y brindar aclaraciones contundentes. En una publicación oficial, Hashim afirmó categóricamente que la empresa nunca utiliza el contenido de audio, video o chat de las llamadas para entrenar unilateralmente su IA, sino que se requiere el consentimiento expreso de los clientes para cualquier propósito de este tipo. Además, hizo hincapié en que cuando se mencionan los «datos generados por el servicio» en los términos de servicio, se refieren exclusivamente a datos de telemetría y diagnóstico, excluyendo por completo el contenido real de las llamadas de los usuarios.
Con el objetivo de garantizar una transparencia absoluta y salvaguardar la privacidad de sus apreciados usuarios, Zoom actuó rápidamente y actualizó sus términos de servicio. En esta actualización, se incluyó de manera destacada una declaración que deja en claro que no se emplean, ni dentro de Zoom ni con terceros, el contenido de audio, video, chat, intercambio de pantallas ni archivos adjuntos de los clientes para el entrenamiento de modelos de IA.
Esta pronta respuesta de Zoom buscó tranquilizar a sus usuarios, reafirmando que su privacidad se encuentra protegida y que sus datos son tratados con total transparencia. A pesar del malentendido inicial, la empresa se esmera por fortalecer la confianza de su distinguida clientela y ofrece garantías explícitas de que la información sensible no será objeto de mal uso o indiscreciones.
Este incidente resalta la importancia fundamental de establecer una sólida relación de confianza en el ámbito de la inteligencia artificial. Además, recalca la imperante necesidad de preservar la privacidad de los usuarios en los servicios que hacen uso de esta innovadora tecnología.