La relación sorprendente entre Oppenheimer y Interstellar: agujeros negros en la ciencia y la ficción
El físico estadounidense J. Robert Oppenheimer, conocido como el padre de la bomba atómica, ha sido objeto de una película que ha recibido críticas excepcionales en su lanzamiento en cines esta semana. Sin embargo, lo que pocos saben es que esta película está conectada de manera sorprendente con la película Interstellar, también dirigida por Christopher Nolan, y ambas están vinculadas a la formación de agujeros negros.
Según explica Fran Chico en su artículo para el portal especializado Fotogramas, Oppenheimer realizó sus primeras investigaciones sobre la formación de agujeros negros, que son elementos fundamentales en la trama de Interstellar.
En 1939, el físico aplicó la teoría de la relatividad de Albert Einstein para estudiar la contracción y el colapso gravitacional de las estrellas masivas, y fue él quien propuso la existencia de los agujeros negros basándose en la teoría de Einstein y en los estudios de Karl Schwarzschild y Subrahmanyan Chandrasekhar.
De acuerdo con Gonzalo López Sánchez en ABC, Oppenheimer «predijo que una estrella de neutrones podría colapsar por las razones presentadas por Chandrasekhar», haciendo referencia al límite de Chandrasekhar. «Más adelante, (el estadounidense) interpretó la singularidad, a partir del radio de Schwarzschild, como una burbuja donde el tiempo se detenía, para observadores externos, pero no para los observadores que cayeran en las fauces del agujero», añade López Sánchez.
Desafortunadamente, la Segunda Guerra Mundial interrumpió los estudios de Oppenheimer sobre los agujeros negros, que fueron retomados por otros investigadores en un futuro cercano.
En la película Interstellar de 2014, un grupo de astronautas viaja a través del espacio en busca de un nuevo hogar para la humanidad. Kip Thorne, ganador del Premio Nobel de Física, colaboró con Nolan como asesor sobre el tema de los agujeros negros y plasmó en la película un agujero negro que sería la clave para el desenlace de la trama.
En 2022, el Event Horizon Telescope reveló la primera imagen de un agujero negro, muy similar a lo que Thorne había anticipado para Interstellar, lo que no solo confirmó lo que Oppenheimer había predicho décadas antes, sino que también demostró la importancia de la ciencia y la ficción en la exploración de los misterios del universo.