El Telescopio Espacial James Webb capta estrellas similares al Sol en su nacimiento de manera impresionante
Primer plano de estrellas en su etapa de nacimiento captado por el Telescopio Espacial James Webb
El Telescopio Espacial James Webb ha captado un primer plano impresionante de un grupo de estrellas similares al Sol durante su etapa de nacimiento. Esta maravilla tecnológica, gracias a la tecnología de vanguardia, nos permite explorar el universo más allá de lo que jamás imaginamos. La frase «venimos del polvo» nunca había sido tan literal, ya que estas estrellas se captan desde su etapa de chorros de gas rojo estallando en el cosmos y generando una cueva de polvo resplandeciente.
La localidad en la que se tomaron estas imágenes es el cúmulo de nubes Rho Ophiuchi, una guardería estelar ubicada a unos 390 años luz de distancia, la más cercana a nuestra Tierra. Las imágenes fueron recreadas con datos del observatorio espacial de la NASA, ESA, JAXA y la Agencia Espacial de Canadá. Este descubrimiento es de gran interés para la comunidad científica, ya que algunas de las estrellas no se forman como nuestra estrella masiva.
El Telescopio Espacial James Webb, el observatorio orbital más poderoso jamás construido, ha permitido captar un primer plano nítido de estas estrellas jóvenes, de masa similar a nuestro Sol o más pequeñas. Algunas de ellas tienen las sombras características de los discos circunestelares, una señal de que eventualmente se pueden formar planetas a su alrededor. Esto nos permite presenciar un período muy breve en el ciclo de vida estelar con nueva claridad, según explicó Klaus Pontoppidan, científico del proyecto Webb. «Nuestro propio Sol experimentó una fase como esta hace mucho tiempo, y ahora tenemos la tecnología para ver el comienzo de la historia de otra estrella», añadió.
La fotografía del James Webb muestra alrededor de 50 estrellas jóvenes en el cúmulo de nubes Rho Ophiuchi. Christine Chen, astrónoma del Instituto de Ciencias del Telescopio Espacial que opera Webb, describió la imagen como una estrella joven lo suficientemente energética como para hacer una burbuja en la nube de polvo y gas de la que nació. La agencia espacial estadounidense también explicó que estos chorros opuestos al espacio son similares a un recién nacido que estira sus brazos por primera vez hacia el mundo, lo que demuestra la maravilla y la complejidad del universo que seguimos explorando.
