El Observatorio de Chile registra la transformación de una estrella masiva en un magnetar de poder magnético sin precedentes
En el asombroso ámbito astronómico, el destino ineludible de las estrellas masivas ha despertado fascinación y especulación a lo largo de los años. Mientras algunas se transforman en enanas blancas, agujeros negros o nebulosas planetarias, una senda singular resalta por encima de todas: la de los magnetares. Estas enigmáticas entidades cósmicas, surgidas de la extraordinaria fusión entre una estrella de neutrones y una supernova, se distinguen por su deslumbrante fuerza magnética, que cautiva los sentidos.
Recientemente, en el prestigioso Observatorio La Silla de ESO en Chile, el espectrógrafo FEROS capturó con precisión el nacimiento de uno de estos fenómenos. El descubrimiento, liderado por el eminente astrónomo André-Nicolas Chené del NOIRLab, ha revelado la presencia de una estrella excepcional con el campo magnético más poderoso jamás registrado en una estrella masiva.
«André-Nicolas Chené, con un entusiasmo palpable, declaró: «Por primera vez, hemos desvelado un campo magnético de gran intensidad en una estrella masiva compuesta principalmente de helio, lo cual indica que está destinada a evolucionar hacia un magnetar».
El equipo de científicos sugiere que esta estrella en particular, a diferencia de otras compuestas de helio que se transforman en supergigantes rojas durante su evolución, posiblemente se haya formado mediante la fusión de un par de estrellas de masa intermedia.
«Este escenario en particular plantea cuestiones intrigantes sobre el origen de los magnetares, cuántos de ellos surgen de sistemas similares y cuántos se originan en otros tipos de sistemas», reflexionó Chené. La estrella objeto de estudio, conocida como HD 45166 y ubicada a una impresionante distancia de 3.000 años luz en la constelación de Monoceros, poéticamente llamada el Unicornio, se estima que culminará su existencia deslumbrando el cosmos como una supernova en unos pocos millones de años.
Los magnetares, una clase especial de estrellas de neutrones, emergen como los vestigios de gigantes estelares que han estallado en supernovas. Estos astros compactos poseen una densidad extraordinaria, con una masa similar a la del Sol pero un radio que abarca apenas unos pocos kilómetros. De hecho, la densidad de incluso una pequeña porción de una estrella de neutrones supera con creces la de cualquier montaña terrestre.
No obstante, lo que distingue verdaderamente a los magnetares es su campo magnético excepcionalmente poderoso, millones de veces más intenso que los campos magnéticos terrestres que conocemos. Esta impresionante fuerza magnética se genera gracias al dinámico movimiento de electrones y protones en el interior de estas estrellas de neutrones, otorgándoles una singularidad magnética sin precedentes en el vasto cosmos.
Star HD 45166, a rare Wolf-Rayet star, was recently the focus of an eye-opening study. Researchers have found that it has the strongest magnetic field ever recorded for a massive star. This discovery challenges our current knowledge of stars and their evolution. It also suggests… pic.twitter.com/u7SiVASf7h
— R.Kamel physicien (@m88RB87) August 24, 2023